Agencia de Noticias UN.- La unión de la nanotecnología con el magnetismo permite la creación de un nuevo término: el nanomagnetismo, que aunque suena raro, se puede vincular con elementos presentes en la nevera de la casa o, en un futuro, en los nanorrobots.
“Dentro de las próximas aplicaciones, se piensa en los nanorrobots que van a estar dentro de nuestro cuerpo. Se habla de partículas más pequeñas que un glóbulo rojo, pero que, por ejemplo, pueden cargar medicamentos o detectar anticuerpos, por lo cual serán útiles en diagnósticos”.
Así lo explica el físico argentino Roberto Zysler, invitado al Departamento de Física, quien labora en el Centro Atómico Bariloche y lleva más de 23 años trabajando con estas partículas magnéticas.
También se pueden aprovechar para diseñar pequeños chips, como los de un computador, con un campo magnético muy sensible para que detecte un anticuerpo, un pedazo de ADN o una proteína y se active. Así, con un computador portátil se podrá saber si una persona es diabética o diagnosticar cualquier otra enfermedad sin necesidad de ir al hospital. “Son cosas que uno sueña y que ya se están haciendo realidad”, afirma el investigador.
El magnetismo se relaciona con esa magia de ver cómo un imán atrae los metales o se repele sin tocarse. Gracias a eso se puede usar en aplicaciones cotidianas como auriculares, parlantes, micrófonos, timbres o en el arranque de un carro.
En cuanto a la nanotecnología, se puede decir que es toda esta tecnología a nivel nanométrico (millonésima parte de un milímetro). El borde de una hoja de papel equivale a 10 micrones y cuando hablamos de algo nanométrico es 100 mil veces más pequeño que el grosor del cabello.
Así se descubrió que las propiedades de los materiales comunes a esta escala cambian por completo. “Por ejemplo, el oro es amarillo, inerte y se funde a 1.200 grados centígrados, pero si se logra hacer nanopartículas de este metal de 3 a 5 nanómetros, cambia de color (vinotinto), se funde a una temperatura inferior y tiene propiedades catalíticas”, dice Álvaro Duarte, profesor de química de la Universidad Nacional.
La nanotecnología se está aplicando principalmente en dispositivos electrónicos que se usan a diario. Hay transistores que se están haciendo a una escala por debajo de los 100 nanómetros.
“Por eso, si se combina el nano con el magnetismo resultan materiales que son interesantes por sí mismos, no solamente porque tengan una composición diferente, sino por sus nuevas propiedades”, sostiene el profesor Zysler.
Dentro de las aplicaciones que se ven a diario están, por ejemplo, los imanes con imágenes publicitarias que se pegan en las neveras y que están hechos de partículas muy pequeñas, cuya intensidad de magnetismo es tan grande que hace que se peguen.
También existen los auriculares pequeños de alta fidelidad y computadoras con terabytes muy económicas. “Hoy en día una memoria de gran capacidad no tiene un costo alto y eso tiene que ver con hacer las cosas cada vez más pequeñas y magnéticas”, afirmó el experto argentino.
Asimismo considera que en cuanto a investigación en esta área, Latinoamérica ha avanzado gracias a sus buenos equipamientos y la capacidad de su gente, muy bien formada.
En Colombia hay por lo menos 20 grupos de investigación que dicen trabajar con nanotecnología o en temas relacionados. Hay alrededor de 300 investigadores, de los cuales 122 tienen título especializado de maestría y doctorado en nanotecnología.
Fuente: http://www.agenciadenoticias.unal.edu.co/